Hoy os cuento una historia algo personal. Mis abuelos, supongo que como los de muchos de vosotros, desde Marzo hasta ahora han tenido más achaques de los que acostumbraban.
Primero, un resbalón, con el consecuente golpetazo del hombro contra el suelo. Valoración del médico: traumatismo tras caída, se recomienda tomar analgésicos. Entre los antiinflamatorios y los tratamientos de su nieta fisioterapeuta (presente), todo más o menos controlado. Sí que me llamó la atención, que el dolor no tuviese el sentido lógico que yo veo en mis pacientes. Pasábamos de no poder levantar el brazo a conseguir absolutamente todos los rangos de movimiento sin dolor en una misma sesión. Me parecía curioso a la vez que me desconcertaba la evolución de su dolor y pensé que quizá quisiera alargar el tiempo de tratamiento para tenerme allí.
Después, la lumbalgia de mi abuelo que le obligó ir a urgencias porque le faltaba incluso la respiración. Cuando mejoró mi abuelo, empezó mi abuela y así sucesivamente.
Yo lo dije a mediados de Marzo, el coronavirus nos estaba arrebatando a nuestros mayores, pero que esto no iba a ser lo único ni lo peor. El encierro en casa, la falta de movimiento, de ejercicio físico y socialización (por mínima que sea), nos vuelve locos poquito a poco. Si para nosotros es difícil mantener esa cordura, para un anciano la línea entre la salud mental y la demencia, en estas situaciones, es muy fina.
Ayer, estuvieron mis padres viendo a mis abuelos. Mi abuela está hasta arriba de analgésicos, calmantes y relajantes musculares para su dolor de «riñones«, pero ¿sabéis qué? después de la visita, mi abuela, como aquella vez con el brazo, estaba mucho mejor. Y no fue obra precisamente de los calmantes.
Si no habéis visto la película de Patch Adams, tenéis que verla (está en Netflix). A mi como sanitaria se me había olvidado la importancia de humanizar nuestra profesión. Y al resto como sociedad se nos está olvidando cuidar de nuestros mayores. Por protegerles, les estamos dejando morir.
«Los medicamentos alivian el dolor, pero sólo el amor puede aliviar el sufrimiento» Patch Adams.
Por todo esto, os propongo que te quedes hasta el final de esta ristra de ideas. La mejor de ellas te la dejo al final.
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1. PULSERA ESCAPULARIO DEL CARMEN @luceromiobisuteria
Lo bueno de todas estas ideas que te doy, es que la gran mayoría sirven para mayores, jóvenes y menos jóvenes. ¿Cómo es de bonita esta pulsera?. A mi abuela le hace feliz únicamente con el escapulario.
2. HANDMADE BY MAJO (Ilustración de todos los nietos + virgencita o santo de su devoción, Majo las hace preciosas!)
3. DELANTALES @homeandhope
Me parecen un regalazo. Mi abuelo ya tiene el suyo con su nombre bordado y no sabéis lo feliz que le hizo.
Ojito porque es un muy regalo también para guardias civiles, para militares y policías,(en el color azul marino).
4. SOMBREROS @sombrereriayoqs
Desde que tengo uso de razón recuerdo a mi abuelo con sombrero y traje. No sabéis lo que tarda en arreglarse para salir a la calle así que os podéis imaginar la ilusión que le tiene que hacer a un Dandi un buen sombrero, una corbata elegante o unos calcetines diferentes.
He elegido a sombrerería Yoqs porque tiene un montón de videos explicativos sobre el arte de los sombreros. Hace dos horas que le sigo y ya soy fan. Por si te lo preguntabas, sí, he heredado el buen gusto por los sombreros como mi abuelo!.
5. CORBATAS @LACORBATERIAEPEPE
6. CALCETINES CHULOS
7. RELOJ DE ACTIVIDAD
Me parece una idea genial para motivarles a caminar. El reloj contará sus pasos o les avisará cuando lleven mucho tiempo sentados.
8. PULSERA CON LOCALIZADOR Y LLAMADA DE SOCORRO
Para casos más concretos de enfermedades o demencias.
9. ABUELO HABLAME DE TI:
Si tu abuelo/ abuela no quiere ningún regalo, este es su REGALO. Dile que el/ ella solo tiene que escribirlo y devolvértelo relleno. Técnicamente el regalo es para ti. jajajajaaj
10. UN MARCO digital de fotos:
- Mis abuelos no tienen smathphones y no pueden tener todas las fotos que les gustaría nuestras. Esta es una muy buena opción para ir actualizando fotos y ellos puedan tenerlas siempre cambiando en su salón.
11. UN SACO TERMICO
Para el invierno y para los dolores musculares vienen genial.
12. REGALAR TIEMPO.
Esto no debería ser un regalo en sí. Cómo si de algo extraordinario se tratase.
Créeme que el regalo te lo hacen ellos a tí cuando tú decides dedicarles tiempo.
Os propongo regalarles paseos acompañados, planes que les protejan pero que no les aleje de vosotros. Seamos creativos que estoy segura que se puede. Tomando todas las medidas de seguridad que nos recomiendan. ¿Te apuntas?
Cuéntame en comentarios que planes anti-covid propones para hacer felices a nuestros abuelos.
Te leo 🤭😆
Por cierto, soy muy pesas y tengo unas 8 ideas más sobre este tema jajajajajajja muy pronto os las enseño.
Buenas noches a todossss
No, él nunca me regaló flores 